El otro día me di cuenta que yo tendría que haber nacido en los años sesenta, setenta. Ahí todos eran hippies, todos eran "paz y amor" y promovían un aura de libertad que nunca más se va a poder alcanzar. No digo que yo sea la "Mujer Libertad", no. Soy re quilombera y siempre hay un embrollo diferente en mi vida que hace que querer ser pacifista se me haga totalmente difícil (imposible no es nada).
Quiero llegar a eso: a solucionar todo con la charla, a no recurrir a los insultos o ala violencia física. Quiero dar a conocer mis pensamientos y que otras personas diga: "Oá, qué copado lo que piensa esta piba. Vamos a llevarlo a la práctica". Estaría bueno. Lo deseo un montón, quiero ser friki al 100%, por lo menos con mis pensamientos y no tanto en lo externo. Con sentirme hippie me conformo.
Considero que todos los adolescentes de hoy tendríamos que aplicar el "Flower Power" a nuestras vidas, comenzar a usar ese espíritu de nobleza y de anti-violencia para que nuestra sociedad no siga decayendo cada vez más. Hay que hacer el amor y no la guerra. Lo único que tenemos que priorizar en nuestras vidas es hacer lo que sentimos y sentir lo que hacemos. Disfrutar, como dije en la entrada anterior, disfrutar esta vida a nuestra manera. Eso dice el movimiento hippón, el flower power.
Es muy fácil de decir pero difícil de aplicar a la vida cotidiana. Hay que pensar dos veces antes de decir o hacer algo para que de esta manera nuestra mente y cuerpo se vaya acostumbrando a nuestro nuevo método de vida.
Debe ser tan lindo promover algo a lo que ya todos hacen caso omiso. Es tener personalidad, saber que dejaste tu huella o un legado en la historia. Te morís tranquilo sabiendo que vos nunca ocasionaste problemas violentos e hiciste todo lo posible para alcanzar de nuevo el movimiento flower power.
El alma es el principal motor de la vida, no hay que olvidarla ni dejarla de lado. Hay que sentir más y más cada cosa que hacemos, porque puede ser la última.
Quiero llegar a eso: a solucionar todo con la charla, a no recurrir a los insultos o ala violencia física. Quiero dar a conocer mis pensamientos y que otras personas diga: "Oá, qué copado lo que piensa esta piba. Vamos a llevarlo a la práctica". Estaría bueno. Lo deseo un montón, quiero ser friki al 100%, por lo menos con mis pensamientos y no tanto en lo externo. Con sentirme hippie me conformo.
Considero que todos los adolescentes de hoy tendríamos que aplicar el "Flower Power" a nuestras vidas, comenzar a usar ese espíritu de nobleza y de anti-violencia para que nuestra sociedad no siga decayendo cada vez más. Hay que hacer el amor y no la guerra. Lo único que tenemos que priorizar en nuestras vidas es hacer lo que sentimos y sentir lo que hacemos. Disfrutar, como dije en la entrada anterior, disfrutar esta vida a nuestra manera. Eso dice el movimiento hippón, el flower power.Es muy fácil de decir pero difícil de aplicar a la vida cotidiana. Hay que pensar dos veces antes de decir o hacer algo para que de esta manera nuestra mente y cuerpo se vaya acostumbrando a nuestro nuevo método de vida.
Debe ser tan lindo promover algo a lo que ya todos hacen caso omiso. Es tener personalidad, saber que dejaste tu huella o un legado en la historia. Te morís tranquilo sabiendo que vos nunca ocasionaste problemas violentos e hiciste todo lo posible para alcanzar de nuevo el movimiento flower power.
El alma es el principal motor de la vida, no hay que olvidarla ni dejarla de lado. Hay que sentir más y más cada cosa que hacemos, porque puede ser la última.